Uno de los grupos más excluidos de nuestra sociedad son las personas mayores y la pandemia sólo ha aumentado esa exclusión en un contexto en que las comunicaciones en línea son fundamentales para mantener el contacto con la familia y con los pares.

El equipo de educadores y educadoras de la Fundación ha realizado un trabajo sistemático, durante todos estos meses, para continuar con la mayoría de las rutinas que realizaban en los diversos talleres a través de distintas modalidades. Una de ellas ha sido la conexión en línea, especialmente a través de whatsapp.

Un catastro hecho durante este tiempo, dio cuenta que hay cerca de 200 personas mayores de distintos sectores de Cerro Navia, Lo Prado y Pudahuel (Barrancas), quienes no han podido participar de estas actividades y sobre todo, de la socialización que se produce en ellas, por no contar con un teléfono que les entregue conectividad.

Para poder disminuir esta enorme brecha no sólo digital si no social, que ha aumentado con esta pandemia, el equipo comenzó una campaña para recolectar celulares en desuso, en buen estado y que estén habilitados para portabilidad, que poder entregar en el territorio.

“No queremos que haya personas mayores que sólo por la falta de un teléfono pierdan contacto con sus familiares y con sus compañeros y compañeras de rutina, porque eso tiene un impacto directo en su calidad de vida en el contexto en que estamos  viviendo hoy”, explica Carolina Ulloa, encargada de programa. Y agrega: “Hay muchas personas que cambian teléfonos frecuentemente, y esos aparatos que quedan en las casas como chatarra electrónica, podemos darles un verdadero uso social”.